Autoconocimiento, Disciplina y Sentido
de Justicia Son Centrales en el Arte de Vivir
 
 
Carlos Cardoso Aveline
 
 
 
 
 
* Los buenos libros acerca de temas eternos constituyen una excelente escalera hacia el cielo. La sustancia del cielo más elevado, según esclarece la teosofía, está en el alma de uno.
 
* Vivimos de acuerdo con lo que pensamos en el pasado y también seguimos las líneas de nuestras perspectivas presentes de la realidad, tal como dice el Dhammapada en su primer capítulo. La vida es el resultado de ideas, imágenes e intenciones. Los mismos factores determinan la acción. Incluso la manera en que miramos el pasado y el futuro depende de la naturaleza de nuestra meta principal.
 
* La acumulación indebida de impresiones inferiores abre el camino a la parálisis, mientras que la comprensión y el desapego liberan la mente. Al renunciar a los asuntos de poca importancia, a las preocupaciones, deseos, miedos y ambiciones, abrimos espacio en nuestra vida a mejores acontecimientos y a serendipias. De este modo damos la bienvenida a pensamientos más claros y perspectivas más iluminadas del mundo.
 
* Para conocer algo mejor, hay que alejarse relativamente de ello. Cuando uno vive por un tiempo en el extranjero, llega a conocer más profundamente su país natal. A medida que uno trasciende su cuerpo físico, comprende con mayor exactitud cómo el cuerpo trabaja y puede educarlo y entrenarlo con mayor efectividad.
 
* En filosofía esotérica, el objetivo del esfuerzo no es obtener un conocimiento verbal de los temas sagrados y mostrar a los demás lo sabio e inteligente que uno pretende ser. El objetivo real es expandir el contacto con el alma superior o yo inmortal. Sin embargo, una vez que este contacto se expande, uno raramente es visto como un sabio por los demás. Normalmente los sabios pasan desapercibidos en una sociedad materialista. Son “invisibles” y a menudo se vuelven objeto de hostilidad, mientras que las personas egoístas y las mentes superficiales pueden fácilmente posar de sabios. La leyenda de Jesús y las vidas de Blavatsky, Cagliostro y Paracelso, entre otros ejemplos, nos enseñan valiosas lecciones al respecto.
 
* La sabiduría es posible para quien está libre de impulsos ciegos y acciones descuidadas. Tiene que haber moderación para que uno pueda mantener el equilibrio y la perspectiva debidos. La fuerza interna ha de ser mayor que la fuerza externa. La paz tiene lugar cuando hay orden en el alma, así como buena voluntad hacia todos, y una autodisciplina estable.
 
* Para los peregrinos autorresponsables, no hay autoridad por encima de la voz de su conciencia. En teosofía, el liderazgo es una cuestión de afinidad, mucho más que de “posición social”. La influencia de una autoridad legítima preserva y mejora la independencia y el sentido del deber de uno.
 
* El buscador de la verdad cumple con sus obligaciones personales. Obedece las leyes del país en el que vive. Es lo más inofensivo que puede. Sigue su corazón y aprende de sus errores. Piensa en lo más elevado y en lo supremo. Su perspectiva universal de la vida lo protege a cada paso.
 
* La fuerza del hábito forma parte de la ley de los ciclos, y su funcionamiento se vuelve más fácil de ver en el ámbito de la existencia personal. La tendencia a repetir acciones agradables y a no repetir las desagradables se fortalece pronto, especialmente en los niveles inferiores de consciencia.
 
* A medida que pasa el tiempo, hasta las situaciones desagradables pueden producir apego. El discernimiento es necesario para liberarse de las causas del sufrimiento.
 
* En teosofía, experimentar placer o dolor no es la prioridad central: el objetivo principal consiste en elegir las acciones correctas y abandonar las incorrectas.
 
* La fuerza del hábito es más flexible y abierta al cambio en los niveles superiores de percepción, debido a la sustancia altruista de estos. Como resultado, aparentemente hay un desequilibrio en la constitución humana. Las energías superiores están dispuestas a ceder, mientras que las inferiores quieren prevalecer a toda costa. El equilibrio de fuerzas parece inclinarse a favor del egocentrismo. Sin embargo, tal apariencia de un “déficit de fuerza externa” por parte de los impulsos generosos solo puede engañar a los ingenuos. Independientemente de los acontecimientos de corto plazo, el único poder duradero es el de la ley de la justicia para todos, y la bondad es el camino hacia esta justicia.
 
* La buena voluntad no es lo mismo que la pasividad amistosa. Una buena voluntad activa es muy necesaria para que la fuerza del hábito sea usada correctamente.
 
* El autoconocimiento, la autodisciplina y el sentido de justicia son centrales en el arte de vivir. La acción correcta es como un mantra, en el sentido de que es cíclica, y depende de una perspectiva correcta de la realidad.
 
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El artículo “Ideas a lo Largo del Camino – 43” está disponible en los sitios web de la Logia Independiente de Teósofos desde el 13 de octubre de 2025. Fue publicado inicialmente como parte de la edición de enero de 2022  de “El Teósofo Acuariano”.   El texto es una traducción del inglés, hecha por Alex Rambla Beltrán: Thoughts Along the Road – 43.
 
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Helena Blavatsky (foto) escribió estas palabras: “Antes de desear, trata de merecer”. 
 
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